Año 2125
Nullblood crecía como proyecto.
Aún no era lanzado, pero se hablaba mucho de él: se decía que podría cambiar las reglas mismas de la vida.
Pero todo tiene un precio, y pronto lo descubrirían.
En este tiempo, Viktor continuaba con sus experimentos. Trabajaba solo, alejándose de todos, aunque de vez en cuando compartía ideas o ayudaba en lo que él creía conveniente.
El mundo de Nullblood había avanzado enormemente. Gracias a una enorme cantidad de información recopilada, lograron recrear un mundo gigantesco para servir como base a los chips de alma.
Historiadores, programadores y especialistas trabajaron juntos para construir historias, ecosistemas, culturas y todo lo que un “nuevo mundo” necesitaba.
Mientras tanto, la Mordida seguía cobrando vidas, especialmente entre personas pobres o aún más vulnerables.
Aquellos infectados y luego “sanados” mediante trasplantes, si eran usados para crear chips de alma, resultaban inútiles: al entrar en Nullblood simplemente desaparecían.
Los ricos, por otro lado, podían pagar por partes de cuerpos y tratamientos. Aun así, la información sobre Nullblood seguía oculta para la mayoría.
Solo los considerados “sanos” podían ser introducidos en el nuevo mundo, y aun así había un 30% de éxito contra un 70% de fallas.
Año 2133
Tras años de experimentos secretos, Viktor descubrió algo crucial:
los chips de alma solo funcionaban con personas que no hubieran sido alteradas, es decir, que no tuvieran partes de otras almas instaladas en su cuerpo.
Eso explicaba por qué fallaban los chips fabricados con gente infectada por la Mordida y luego reparada mediante trasplantes.
Para probar su teoría, creó personas artificiales… y tuvo un éxito contundente.
Cuando compartió la información, muchos se preguntaron cómo había descubierto algo que parecía tan simple, aunque claramente no lo era.
Algunos lo criticaron, otros urgían explicaciones.
Pero un pequeño grupo lo defendió.
Ese mismo grupo se unió a Viktor para crear las Camadas: seres humanos artificiales destinados a cualquier tipo de actividad, legal o ilegal.